No ha pasado ni un mes desde el trágico accidente que terminó con la vida de Paul Walker y su familia ya está envuelta en una guerra por su herencia, según informaron medios estadounidenses.
Los bienes del protagonista de la saga de “Rápidos y furiosos” ascienden a alrededor de $40 millones, y ninguno de sus allegados quiere quedarse sin nada.
Sin embargo, no sólo los familiares están en disputa por Paul Walker, sino también sus fans y los vecinos de Santa Clarita.
Los seguidores de Walker quieren cambiar el nombre de la calle donde murió junto con su amigo Roger Rodas y llamarla “Walker Rodas Memorial Parkway”.
Pero los vecinos de Santa Clarita se oponen, pues argumentan que Paul Walker no hizo nada por la comunidad; y califan de absurda la intención de los fans.